Los interruptores automáticos protegen las instalaciones contra sobrecargas y cortocircuitos, por lo que garantizan la fiabilidad y la seguridad de las maniobras. La serie de interruptores compactos SH-200 tiene dos mecanismos de protección contra sobrecorriente, uno de disparo térmico para la protección contra sobrecargas y el mecanismo de disparo electromagnético para la protección contra cortocircuitos.